Hipotecas a tipo fijo, una opción a tener en cuenta

Las hipotecas a tipo fijo son sin lugar a dudas las grandes desconocidas en nuestro país, a diferencia del resto de países en la Unión Europea donde el número de este tipo de hipotecas es bastante considerable. Aquí en España el 98% de las hipotecas contratadas son a tipo variable. Por lo que solamente un 2% opta por este tipo de hipotecas.

Las razones principales por las que normalmente la gente se hipoteca a tipo variable es que suele ser más barato... pero en algunas ocasiones acaba siendo más caro. Todo depende del mercado, de los tipos de interés y como no, del tan temido Euribor (la pesadilla de nuestro tiempo).

La principal diferencia entre una hipoteca a tipo fijo y una a tipo variable es como bien indica su nombre, el tipo que se aplica a la hipoteca. Si bien la hipoteca a tipo fijo sabes desde el primer día lo que vas a pagar durante la vida de la hipoteca, las de tipo variable son susceptibles de cambios según el indice de referencia (normalmente el Euribor más un porcentaje denominado "diferencial"). Además, las hipotecas de tipo fijo suelen tener un plazo más reducido, un interés más alto en el momento de la contratación y unas comisiones más elevadas.

Por ejemplo, ahora mismo tenemos por ejemplo hipotecas a tipo variable con un interés de Euribor + 0,39%, con lo que el interés inicial será de unos 4,5%, y un plazo máximo de 40 años. Mientras que las de tipo fijo pueden rondar un 5,5% con un plazo máximo de 30 años.

Así a priori puede parecer bastante más rentable la hipoteca a tipo variable, pero señores (y señoras), los tipos están subiendo, y lo que hoy es un 4,5% dentro de un año, cuando le revisen la hipoteca, seguramente esté cercano a un 5% (en tan solo un año!!!). Así que si sigue la tendencia alcista de los tipos de interés, será más que aconsejable una hipoteca a tipo fijo antes que a tipo variable.

Particularmente recomiendo a todo el mundo echarse unas pocas cuentas. En mi caso he comprobado que una hipoteca "barata" a tipo variable a 40 años me supondría una cuota inicial de entre unos 950 - 1000 euros al mes. Mientras que con una hipoteca a tipo fijo a 30 años me supondría una cuota de unos 1100 euros al mes. Tal vez pagar esa diferencia inicial me pueda ahorrar en el futuro situaciones tan crudas como las que vivimos todos en nuestro entorno.
Por tanto, si tenemos en cuenta el menor plazo (10 años de diferencia!) y la tendencia de los tipos de interés, creo que puede ser una opción muy a tener en cuenta, pues tendrás la tranquilidad de saber que por mucho que suban los tipos de interés, tu cuota mensual no sufrirá ninguna variación. Eso sí, al igual que no te subirá la cuota, en una más que hipotética rebaja de los tipos, tampoco sufrirá un descuento en su cuota mensual.

Tal vez haya llegado la hora de las hipotecas a tipo fijo, o las mixtas.